Por Marco A. Mares

Con cargo al erario federal el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció tremendo beneficio para adultos mayores que ya reciben o que apenas recibirán la pensión universal.

Evidentemente, se trata de un bazucazo electoral.

El paquete de beneficios tendrá un costo de 370,000 millones de pesos por año, a partir del año 2024 para alrededor de 10.3 millones de adultos mayores.Los aumentos serán graduales y anuales.

En consecuencia el presupuesto gubernamental anual pasará de 135,000 millones de pesos al cierre de este año 2021, a 240,000 millones de pesos en el año 2022, 300,000 millones de pesos en el 2023 y 370,000 millones de pesos en 2024. El aumento a los montos que recibirán los pensionados bajo el sistema de pensión universal, comenzará en julio de este año, con un alza de 15 por ciento. Luego se harán ajustes del 20% en enero de 2022, 2023 y, finalmente, de 2024, hasta que la pensión alcance los 6,000 pesos bimestrales.

En resumen, el presidente de la República prometió que más personas recibirán pensión universal; que crecerá el monto de este apoyo y que lo entregará a partir de los 65 y no de los 68 años, como es hasta ahora. Prevé duplicar los montos de las pensiones actuales, para el año 2024.

El programa, sin la menor duda, será recibido con enorme beneplácito por parte de los beneficiarios.

Y será un lastre adicional al que ya de por sí representan los sistemas de pensiones para las finanzas públicas. Con el aumento a la pensión universal, al llegar a 6,000 pesos bimestrales costará 370,000 millones por año (245,000 millones de pesos más) en el presupuesto de 2021. Los 370,000 millones de pesos, son 40% de la presión fiscal del resto de las pensiones en el Presupuesto de 2021.

Esta pensión universal será tan onerosa como la Ley 73, IMSS Régimen de Jubilaciones y Pensiones (jubilados IMSS), Pemex y CFE en lo individual.

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