México. Cada día más digitales, pero aún sin ahorrar para el retiro

¿Qué tan buenos hábitos financieros tienen los mexicanos? Después de conocer los resultados de la más reciente Encuesta Nacional de Inclusión Financiera (ENIF) quizás muchos quieran añadir otros propósitos a la lista del 2019.

La publicación de la ENIF 2018 dada a conocer a finales de noviembre del año pasó un poco desapercibida debido a que la atención se enfocó al cambio de gobierno y las vísperas de las fiestas decembrinas, pero ahora que se inicia un nuevo año es importante conocer los resultados de la encuesta para reflexionar sobre los hábitos financieros y realizar los cambios necesarios para tener una mejor salud financiera.

En este sentido, la ENIF 2018 revela avances en algunos de los hábitos financieros de los mexicanos. Por ejemplo, la disminución de las personas adultas (entre 18 y 70 años) que tuvieron atrasos en el pago de los créditos es evidente y el incremento de las personas que cuentan con un servicio de banca por celular es muy positivo; sin embargo, aún se conservan hábitos financieros poco saludables con respecto a la planeación financiera, el ahorro, la prevención y el ahorro para el retiro.

De acuerdo con la edición 2018 de la encuesta, en comparación con la del 2015 se observa una disminución de las personas que tuvieron atrasos en el pago de sus créditos en general. Esta tendencia es más marcada en productos crediticios como la tarjeta de crédito bancaria, en donde las personas que afirman haber tenido atrasos en el pago de su tarjeta pasaron de 29.1% en el 2015 a 20.2% en el 2018; o en tarjeta de crédito departamental o de tienda de autoservicio, donde las personas con atrasos pasaron de 37.9 a 28.7% en estos mismos tres años. Lo anterior podría interpretarse como una señal de que entre los mexicanos existe una mejor planificación de las deudas con el ingreso que se tiene y una mejor organización al momento de planificar tales pagos.

También hay buenas noticias en cuanto al incremento de personas que cuentan con el servicio de banca por celular, pasando de 937,000 personas con este servicio en el 2012 a 7.8 millones de personas en el 2018, lo que ahora representa 10% de la población adulta. Hecho considerablemente favorable, ya que representa la migración hacia herramientas financieras más eficientes que permiten ahorrar no solamente tiempo, sino dinero que se puede destinar a otros fines más productivos.

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