Estos son los principales cambios que propone la reforma de las pensiones en España
España se encuentra en medio de una significativa reforma de su sistema de pensiones con el objetivo de asegurar la sostenibilidad a largo plazo del sistema público de reparto y garantizar prestaciones dignas y equitativas. Esta reforma presenta novedades destinadas a beneficiar a las pensiones mínimas, permitiendo que estas aumenten por encima del Índice de Precios al Consumo (IPC). Además, ofrece opciones para una jubilación anticipada bonificada a aquellos pensionistas con carreras de cotización extensas, es decir, más de 44 años y medio de contribución al sistema.
Uno de los cambios clave en la reforma es la modificación de la edad legal de jubilación ordinaria. A partir de 2024, la edad de jubilación ordinaria será de 65 años para aquellos que hayan cotizado más de 38 años, mientras que para aquellos con menos cotizaciones, la edad de jubilación se establecerá en 66 años y 6 meses. Esta edad aumentará gradualmente en dos meses por cada año hasta 2027. A partir de ese año, la edad de jubilación será de 67 años, o de 65 años para aquellos con al menos 38 años y 6 meses de cotización.
Este cálculo es esencial para establecer el 100% de la pensión a la que una persona tiene derecho. Los últimos 25 años o 300 meses de cotización son, por lo tanto, críticos para determinar el monto de la pensión.
En algunas situaciones, se pueden aplicar reducciones a estas bases de cotización, como en el caso de los trabajadores que dejaron de trabajar debido a razones ajenas a su voluntad. En tales casos, se puede aplicar la integración de lagunas, lo que permite sumar cotizaciones utilizando la base mínima de cotización para los primeros 48 meses y el 50% de esa base para los siguientes períodos. Los trabajadores autónomos no pueden acceder a esta opción.
La pensión en base a los años trabajados
El porcentaje de la pensión que corresponde a un trabajador se basa en los años trabajados. Para acceder a una pensión de jubilación, se requiere un mínimo de 15 años cotizados, lo que da derecho al 50% de la base reguladora. A partir de ese punto, el porcentaje aumenta un 0,21% durante los siguientes 49 meses y luego un 0,19% durante los 209 meses subsiguientes. Así, aquellos con 36 años y seis meses cotizados tienen derecho al 100% de la base reguladora o pensión.
La reforma de las pensiones también considera la implementación de complementos para reducir la brecha de género, permitiendo que tanto hombres como mujeres accedan a un complemento por hijo en la pensión, que asciende a 425,6 euros por año por hijo, con un máximo de cuatro hijos.
Además, en ciertas situaciones, el tiempo de servicio militar o prestación social sustitutoria también se puede contar para la jubilación anticipada, aunque con un límite de un año. Aquellos que opten por la jubilación anticipada deben considerar coeficientes reductores en función del número de meses de adelanto, la edad de jubilación y el período de cotización acumulado.
Esta reforma de pensiones tiene como objetivo adaptar el sistema a las cambiantes condiciones demográficas y económicas, asegurando un equilibrio entre la sostenibilidad y la justicia en el sistema de seguridad social de España.
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