Pese a las críticas que le llegan de la mayor parte de partidos políticos y de los sindicatos, el Gobierno se mantiene firme en su estrategia de seguir utilizando el fondo de reserva para poder pagar las pensiones mientras siga estando en déficit el sistema o hasta que concluya el Pacto de Toledo, cuyas recomendaciones confía en que logrará insuflar nuevos ingresos. Así lo volvió a confirmar este jueves el secretario de Estado de la Seguridad Social, Tomás Burgos, durante su comparecencia en la comisión de empleo del Senado, quien reiteró que durante este año el Ejecutivo combinará el préstamo del Estado a la Seguridad Social de 10.192 millones y la ‘hucha’.

“Pese a lo que muchos dicen, el fondo de reserva no se creó para afrontar el cambio demográfico, sino para atender las situaciones bajas del ciclo económico. Y España debe sentirse satisfecha de haber dispuesto de este instrumento que ha minimizado la crisis”, sostuvo Burgos.

Entre 2012 y 2016 el Ejecutivo ha dispuesto de este fondo un total de 67.337 millones de euros y de otros 9.006 del fondo de contingencia, tal y como reconoció el secretario de Estado, que resaltó la alta rentabilidad que se obtiene de esta hucha, puesto que de cada dos euros aportados se genera otro euro adicional como consecuencia de los rendimientos obtenidos. “La gestión de estos activos ha sido extraordinariamente eficiente, “, se enorgulleció. De hecho, esa rentabilidad ha permitido que a cierre del primer trimestre de 2017 el fondo de reserva sume 15.148 millones a precio de adquisición, es decir, que se han ganado 128 millones durante estos tres primeros meses (a cierre de 2016 se situaba en 15.020 millones).

Fuente: Inversión & Finanzas

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