El Ministerio de Hacienda ya transfirió al Instituto Salvadoreño de Pensiones (ISP) el 57% del presupuesto de 2023 para obligaciones previsionales, pero no todos los fondos han sido ejecutados y no se especifica el destino del dinero no usado, según los datos oficiales.

El Instituto Salvadoreño de Pensiones (ISP) ya recibió de manos del Ministerio de Hacienda las transferencias de dinero que suman $244.3 millones para el pago de pensiones, según datos oficiales hasta abril de 2023.

Sin embargo, de esos fondos que le transfirieron, el ISP ha usado $119.5 millones, lo cual no concuerda con el monto que recibió, es decir que hay una diferencia de $124.8 millones de los que no se tiene una especificación en qué se han usado, señalan expertos consultados.

De acuerdo a datos del Portal de Transparencia de Hacienda, en enero de este año le trasladaron $127,230,317 al Instituto de Pensiones; luego en febrero le enviaron $19,448,724 y en marzo fueron $97,677,478, lo cual suma $244.3 millones. Sin embargo, en marzo estaba programado que Hacienda le transfiriera $136,083,448, pero en cambio envió $38,405,970 menos para el pago de pensiones.

En abril y mayo estaban programadas las transferencias de $19,448,724 por cada mes y en junio lo presupuestado para el ISP son $90,174,442. Aún se desconoce si efectivamente esos montos han llegado a manos del Instituto para cumplir con las obligaciones previsionales.

También se desconoce qué ha pasado con los casi $125 millones que el ISP habría recibido pero que no han ejecutado.

Patricio Pineda, fundador y representante de la Mesa por una Pensión Digna, señala que la mayor cantidad de dinero destinado al ISP se ha ocupado para gastos fijos, como pago de salarios, mientras hay un déficit en el pago de las pensiones.

“Con los recortes que se hicieron al fondo de pensiones de $233 millones, la pregunta es para dónde se ha ido ese dinero. Hay una situación delicada: entre lo proyectado y la modificación que se hace han restado de los $570 millones (en el presupuesto), $244.3 millones, que se supone se los tenían que indexar al ISP. La pregunta es: por qué de los $244.3 millones solo han ido a parar $119.5 millones al ISP?”, cuestionó.

En el Presupuesto General de la Nacional de 2023 se detalla que para el financiamiento del Sistema Integral de Pensiones, el ISP tendrá en el año un presupuesto de $570,563, 652, en cuya descripción se especifica que Hacienda va a “transferir recursos para financiar obligaciones previsionales, así como para atender los compromisos pendientes de pago relacionados con el Fideicomiso de Obligaciones Previsionales (FOP)”.

De ese presupuesto, el Instituto ya habría recibido el 57% o al menos los datos de Hacienda indican que ya se los transfirió en los primeros tres meses del año.

Pero Pineda plantea sus dudas: ¿Dónde está el resto del dinero, que son más de $124 millones la diferencia, ¿dónde están las cuentas de ese dinero? ¿y por qué hicieron el borrasaldo?”.

El experto volvió a hacer referencia a que en las estadísticas oficiales del Banco Central de Reserva (BCR) ya no aparece el registro de la deuda de más de $6,000 millones que el gobierno le debe a los trabajadores que le han prestado para que pagara las pensiones del sistema público, el cual incluye a los jubilados del ISSS e INPEP.

“Se está haciendo un borrasaldo contable, porque el efecto inmediato de no registrar la deuda de pensiones en las cuentas públicas reduce la deuda pública en términos contables, pero no fiscal porque la deuda sigue; es más, hicieron hasta un canje”, apuntó Pineda en una publicación de El Diario de Hoy del pasado 8 de junio.

Asimismo, el economista Rafael Lemus señaló días atrás en su cuenta de Twitter que se ha hecho un “borrasaldo” de la deuda pública en dos pasos. El primero que señaló es que “se derogó el fideicomiso FOP (emitía CIP). Un vehículo financiero para emitir deuda pública y obtener dinero para pagar pensiones de ISSS e INPEP”.

La Asamblea eliminó el FOP en diciembre de 2022, mediante el cual el gobierno tomaba prestados ahorros de los trabajadores para pagar las pensiones. Al derogarlo, la deuda acumulada mediante los Certificados de Inversión Previsional (CIP) se debía canjear por los nuevos Certificados de Financiamiento de Transición (CFT), lo cual se hizo en abril pero en condiciones diferentes a las acordadas originalmente y ocasionó que el gobierno cayera en impago.

El otro paso que subrayó Lemus fue que “la reforma de Bukele creó el ISP, ente financiero que emite deuda CFT y COP”.

Los Certificados de Obligación Previsional (COP) son los instrumentos con los cuales ahora el gobierno seguirá emitiendo nueva deuda para pagar las pensiones.

Y tras esos dos movimientos, Lemus agregó que es así como el “GOES borra la deuda”.

¿Cómo ha usado el dinero el ISP?

Sin embargo, el responsable de esa deuda con los trabajadores y del pago de las obligaciones previsionales es el ISP, al cual Hacienda le ha transferido dinero para ello.

El economista Rommel Rodríguez indicó que los datos de la ejecución del presupuesto del ISP establecen que se han utilizado $119.5 millones, pero que no se ha incluido algún pago destinado al FOP.

“Hasta hace dos semanas se habían transferido alrededor de $244 millones. Las transferencias son al ISP para financiar las pensiones y en la base de datos de la ejecución del presupuesto del ISP, al cierre de abril, se habían ejecutado $119.5 millones, lo cual no concuerda con las transferencias”, explicó.

De los fondos que ha ejecutado el ISP, han destinado $80,946,444.85 para la “gestión de pensiones”; mientras que ha asignado $37,565,080.97 al Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS), según los datos oficiales de Hacienda.

En tanto, el Instituto ha utilizado $116,591.46 para la gestión administrativa del pago de pensiones y jubilaciones. Entre esta partida y las anteriores suman $118,628,117. Y para los gastos de dirección y administración institucional del ISP la erogación es de $911,408.21.

Rodríguez explicó que al interior de una cartera de Estado el gobierno puede hacer las modificaciones que estime pertinentes, pero en el caso del presupuesto que se destina específicamente para el pago de pensiones se debe utilizar precisamente para ese fin, pues de lo contrario puede ser “contraproducente”.

“De esos $244.3 millones, $119.5 millones estamos seguros que fueron a parar al ISP. Queda una cantidad de recursos que no se explica claramente dónde están”, acotó el experto.

Leer más @elsalvador