El año pasado fue aquel en que la industria de AFP tocó fondo y comenzó a vivir en peligro.

El impacto acerca de las bajas pensiones dejado por el informe de la Comisión Bravo, el escándalo de los “jubilazos” en Gendarmería y la arremetida del movimiento No + AFP con sus multitudinarias marchas, abrieron una caja de Pandora para la industria.

A esa tormenta perfecta se sumó la polémica por las fusiones de Cuprum-Argentum y Provida-Acquisition, además de la inédita propuesta del Gobierno para instalar un pilar solidario de reparto. A ello ahora hay que agregar la decisión de La Moneda de que el 5% adicional no será administrado por las AFP, que solo parte de dicha cotización adicional estaría destinada a las cuentas individuales y que aquella fracción destinada al fondo de reparto no sería heredable.

La Moneda prometió presentar su reforma antes del 21 de mayo, pero, dado que los elementos más polémicos se están filtrando, se especula que Hacienda podría mostrar todas sus cartas este mes.

Nadie piensa seriamente en que la industria se acabe, pero sí que las reformas que se vienen no serán cosméticas. Y este año, con elecciones de por medio, las AFP van a estar en el corazón de la agenda política.

Así, para defender a la industria en esa batalla titánica que se vislumbra, está Andrés Santa Cruz, hombre ligado al campo, pero también al mundo de los gremios y la política. Fue presidente de la CPC y, antes de eso, de la SNA. En 2015 volvió a la actividad privada, pero no duró mucho. En enero de este año aterrizó en la Asociación de Administradoras de Fondos de Pensiones para reemplazar a Rodrigo Pérez Mackenna.

La salida del ex ministro de Sebastián Piñera era considerada un hecho en la industria a medida que se acercaba la opción presidencial de su ex jefe, pero lo que fue una sorpresa para muchos es que las AFP hayan optado por Santa Cruz –hombre ligado a la derecha dura– para reemplazarlo.

Santa Cruz impresionó con la presentación que hizo ante la Comisión Bravo y, a diferencia del ex ministro de Piñera, es visto como independiente, con buen manejo político y redes transversales.

Fuente: El Mostrador