El 8 de marzo de 2023, hace casi un año, ocurrió uno de los grandes traspiés del Gobierno de izquierdas de Gabriel Boric en Chile: la Cámara de Diputados rechazó la idea de legislar la reforma tributaria. Fue un golpe duro para el Ejecutivo, cuyas promesas de campaña requieren de un incremento en la recaudación fiscal para aumentar el gasto social.

La legislación chilena impide reingresar una iniciativa legal rechazada en el Congreso antes de un año. Hoy, ad portas de ese plazo, el ministro de Hacienda se prepara para insistir con su proyecto en el Parlamento. Es un plan que coincide con el aniversario de los dos años del Gobierno de Boric, que asumió el 11 de marzo de 2022, y que busca dar un reimpulso a la agenda de reformas prometidas con mira a los próximos dos años de mandato que todavía le quedan por delante.

Este es el escenario bajo el cual el presidente chileno ha convocado a un consejo de gabinete para este viernes 1 de marzo, en el que el tema principal será el programa de Gobierno y sus desafíos. Según adelantó la portavoz el Gobierno, Camila Vallejo, será una reunión con todos los ministros y ministras pensando en la agenda legislativa, donde el pacto fiscal y la reforma de pensiones son centrales.

A diferencia de 2023, esta vez la propuesta tributaria estará dividida en diferentes proyectos. Así lo ha planificado el ministro de Hacienda, Mario Marcel, que luego del rechazo sufrido en 2023, modificó la manera de abordar el desafío recaudatorio en lo que ha llamado pacto fiscal. Es una iniciativa que incluye compromisos de mayor crecimiento, un gasto eficiente, mejorar el cumplimiento tributario, además de un aumento impositivo.

El lunes 4 de marzo será el debut de la primera parte de esta reforma. Ingresará a la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados el primero de los proyectos sobre cumplimiento de obligaciones tributarias, que busca disminuir la evasión y la elusión y recaudar 1,5% del Producto Interno Bruto. En general se trata de una iniciativa frente a la cual existe un apoyo transversal. Sin embargo, hay ciertos puntos que pueden encontrar escollos, en particular lo referente a la modificación para el levantamiento del secreto bancario.

Otro de los proyectos que será presentado con posterioridad es la Ley de Créditos Tributarios, tasa de desarrollo y exenciones, dado a conocer por el Gobierno este lunes. Es una iniciativa que, entre otras cosas, propone eliminar siete exenciones tributarias que hoy operan en la economía chilena, en línea con las propuestas realizadas en el informe de la Comisión Tributaria para el Crecimiento y la Equidad que lideró el expresidente del Banco Central, Rodrigo Vergara, en 2021. Entre otras cosas propone suprimir la renta presunta, que los fondos de inversión privado tributen como empresas, elevar el impuesto a las ganancias de capital en instrumentos bursátiles y restringir la deducción de impuestos por intereses hipotecarios. Hasta ahora es esta última medida la que ha generado más ruido, debido a lo deteriorado que está el mercado inmobiliario hoy en Chile y las dificultades de las personas para obtener créditos hipotecarios a tasas competitivas.

La propuesta del ministerio de Hacienda, en todo caso, incluye una rebaja en la tasa de impuesto a las empresas desde el 27% actual hasta el 25% como una manera de impulsar la inversión en el contexto de estancamiento económico que vive Chile.

Aumento a los impuestos personales

Pero donde están los principales problemas es en el proyecto de impuesto a la renta. Es una iniciativa cuyos primeros esbozos fueron presentados el 1 de febrero a los partidos y a la que aún le queda trabajo por delante. Según el calendario tributario, la mesa de discusión para este tema debería cerrarse el 14 de marzo, tras lo cual el Gobierno ingresaría ese proyecto al Congreso. El Ejecutivo busca recaudar 0,6% del PIB por este concepto y focalizarse en un aumento de los impuestos a la renta personal en los contribuyentes de mayores ingresos. Hasta ahora, la propuesta no ha logra convencer a los miembros de la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, donde debe ingresar antes de ser votada en sala.

Eric Aedo, diputado de la Democracia Cristiana (DC) e integrante de la Comisión de Hacienda de la Cámara, dice que “hay dudas razonables frente al aumento de impuestos que se plantea para los sectores medios y profesionales”. “El Gobierno dice que es subirle impuestos a personas con ingresos mensuales superiores a 4.300.000 millones (unos 4.300 dólares), pero eso, que suena harto, afecta a los sectores medios o profesionales con emprendimientos pequeños que no reciben ningún subsidio del Estado”, señala. Y agrega que le han manifestado al Gobierno que no consideran que la mayor recaudación tenga que ir por ese camino “en medio una situación económica que no despega y donde el desempleo sigue alto”.

Tampoco está convencido Carlos Bianchi, diputado independiente, parte de la bancada del Partido por la Democracia (PPD), de la alianza de Gobierno y también miembro de la comisión que debe actuar como filtro para las reformas. “Me cuesta entender esa desinteligencia para castigar a la clase media y a la Pyme (pequeña y mediana empresa). Y además les presentó las propuestas a los partidos y a la prensa, pero no a la comisión y yo no estoy dispuesto a votar en contra de clase media y de la Pyme”, dice. Sin embargo, dice que está dispuesto a escuchar. “Marcel (Mario) no ha podido exhibir ningún trofeo. Yo lo entiendo y quiero ayudarlo, pero no puede hacerlo no respetando la opinión de quienes votamos. Me encantaría que me muestren que ese impuesto no va a afectar a la clase media”, recalca.

Desde el Gobierno confían en poder dar vuelta las miradas de desconfianza y que se apruebe tanto el proyecto contra la evasión y la elusión, el que elimina las exenciones y el impuesto a la renta. En ese sentido, la ministra subrogante de la cartera, Heidi Berner, planteó esta semana que “no basta con el proyecto de ley de cumplimiento de obligaciones tributarias, con el cual esperamos recaudar un 1,5 por ciento del PIB. También necesitamos esta reforma tributaria que espera recaudar en neto un 0,6″.

Las pensiones entrampadas

Mientras tanto, el próximo miércoles 6 de marzo, tras el término del receso legislativo, la Comisión de Trabajo y Previsión Social del Senado dará inicio al debate de la reforma de pensiones, en su segundo trámite constitucional. El proyecto logró sortear la barrera inicial el 25 de enero cuando la Cámara de Diputados aprobó la idea de legislar. Pero, al mismo tiempo, quedó sin parte importante de su contenido: fueron rechazados los ejes centrales del proyecto, en particular la fórmula presentada por el Ejecutivo que proponía que un 3% de la cotización adicional con cargo al empleador de 6% fuera a capitalización individual y el otro 3% a un fondo solidario.

Desde la cartera de Trabajo, la ministra Jeannette Jara ha realizado un llamamiento a la oposición para plantear alternativas para mejorar las pensiones, luego de lo ocurrido en la Cámara. “Creo que es importante que quienes no quieren que exista solidaridad de la generación actual de cotizantes con la generación ya jubilada, presenten alternativas. Porque, si están pensando en que el 6 % completo vaya a la capitalización individual, eso no va a mejorar la situación del millón y medio de pensionados de Chile”, advirtió esta semana, previo a que se abra nuevamente el debate.

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