Reformas del sistema de pensiones: La Experiencia Sueca
Por María del Carmen Boado-Penas
El proceso de reforma de las pensiones en Suecia tuvo como objetivo principal crear un sistema de pensiones financieramente estable en el largo plazo, mejorar la equidad generacional y proporcionar un marco que promoviera la obligatoriedad del ahorro financiero a través del sistema de pensiones. Para este fin, en 1994 el Parlamento sueco aprobó la sustitución de su sistema tradicional de reparto de pensiones públicas de prestación definida por un sistema mixto que incluye dos características principales: una parte de la cotización, en concreto un 16% de la base salarial, se destinaría a un sistema basado en cuentas nocionales mientras que un 2,5% se asignaría a cuentas financieras individuales gestionadas por entidades privadas.
El modelo nocional combina una financiación de reparto con una fórmula para el cálculo de la pensión que depende de las cuantías individuales cotizadas, de sus rendimientos (basados en un índice que refleja la salud financiera del sistema) y de la esperanza de vida del trabajador en el momento de su jubilación. Un plan de cuentas nocionales de aportación definida no es, aparentemente, más que una forma alternativa de calcular la cuantía de las pensiones de jubilación.
Por otra parte, a lo citado anteriormente, se añade la publicación de un balance actuarial anual que fortalece el sistema de pensiones dotándolo de extraordinaria transparencia. A su vez, también se implementa en el sistema público un mecanismo automático de corrección de los desequilibrios financieros. Otra de las buenas prácticas del sistema sueco consiste en mantener a los trabajadores puntualmente informados, especialmente a través del orange envelope, sobre sus futuros derechos, lo que les ayuda a tomar mejores decisiones relacionadas con su jubilación.
En este artículo se describe con detalle el nuevo sistema de pensiones sueco, así como la evolución del balance, mecanismos financieros e información proporcionada a los individuos a lo largo del tiempo.
Fuente: Documentos FEDEA