Las AFP proponen reestructurar deuda del gobierno de El Salvador

En momentos en que el Gobierno ha dejado de pagar $38 millones a los fondos de pensiones, y trata de conseguir fondos para cubrir los $230 millones que debe cancelar este año, las AFP plantean una propuesta de reforma al sistema como la solución al problema del impago.

El Gobierno salvadoreño no incluyó en el presupuesto para 2017 los $230 millones que debe devolver a los fondos de pensión de los trabajadores que cotizan a las AFP y, como resultado, ha incumplido varios pagos que debía hacer en abril. Al finalizar el mes, el incumplimiento sumará unos $55 millones.

La deuda estatal con los fondos suma más de $5,000 millones, y es dinero que ha pedido prestado a los actuales trabajadores para pagar las pensiones de quienes se jubilaron con el antiguo sistema de reparto, y que en su momento cotizaron con el ISSS o el INPEP.

Ahora, el Ministerio de Hacienda busca que la Asamblea Legislativa apruebe la emisión de $282 millones en bonos y usar el dinero obtenido para cubrir la deuda con los fondos. Sin embargo, las Administradoras de Fondos de Pensión (AFP) proponen otra solución: reestructurar la deuda del Gobierno.

Según datos oficiales, el gasto anual por pensiones equivale a un 2 % del Producto Interno Bruto (PIB), ya que el déficit que causó el sistema de reparto –pensiones que hay que pagar a los jubilados en el ISSS e INPEP, pero que debe asumir el Gobierno porque ambas entidades se quedaron sin reservas en 2002– suma unos $24,000 millones.

La propuesta de la ICP es aumentar la actual cotización a las AFP en dos puntos porcentuales, y que pase del 13 % actual a 15 %. De este, se usaría el 5 % para crear una reserva de pensión vitalicia.

Dicha reserva asumiría el financiamiento de las pensiones de los llamados “optados”, trabajadores que estaban en el sistema de reparto y decidieron pasarse a una AFP, y que son beneficiados por el decreto 100. La reserva también cubriría las pensiones mínimas, que hoy por hoy asume el Estado.

Fuente: El Economista