La Conferencia Interamericana de Seguridad Social propone la creación de un modelo mixto de pensiones que parta de una universal como base, represente un monto suficiente para vivir de manera digna y permita al Estado recuperar la rectoría, ante la crisis que vive el modelo de capitalización individual, la elevada fragmentación y la falta de una reglamentación clara que regule a todas las entidades encargadas de administrar el ahorro para el retiro.

En la nota técnica “México: una propuesta para un nuevo sistema de pensiones”, advirtió que en caso de no tomar medidas urgentes “la materialización del problema de las pensiones en México iniciaría en tres años”, porque para 2022, se calcula que 90 mil personas podrán ejercer su derecho a la jubilación: la primera generación Afore, pero “la gran mayoría recibirá una negativa, pues no cumplirán con el tiempo de cotización requerido y, por lo tanto, perderán su derecho a pensión”. Información relacionada: Llama PT a retomar propuesta de sistema de pensiones sin cobro de comisiones Por ello, estos mexicanos “recibirán el ahorro acumulado en sus cuentas para el retiro, quedando sólo con la posibilidad de tener una pensión no contributiva”.

La Conferencia explicó que su nuevo modelo deberá basarse en el beneficio definido con fuentes de financiamiento establecidas para evitar cualquier afectación a las finanzas, y la posibilidad de que las Afore participen administrando los recursos de los trabajadores de mayores ingresos, y crear la Comisión Nacional de Pensiones como órgano vigilante de la nueva ley general de los sistemas de pensiones en México, que procure la sana gestión de las pensiones en el país. Para lograr lo anterior “proponen etiquetar fuentes de financiamiento que aseguren un monto determinado, tales como impuestos especiales adicionales a tabacaleras, bebidas saborizadas, banca múltiple, bebidas alcohólicas e impuestos al capital”.

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