El mayor gasto corriente generado para el pago de pensiones cada vez fue limitando más la capacidad de la economía de invertir en proyectos que deberían de acelerar el crecimiento, según especialistas.

En el gobierno de Enrique Peña Nieto el gasto en pensiones del sector público se incrementó 85 por ciento, y pasó de 429 mil 487.7 millones de pesos en 2012, a 793 mil 734 millones de pesos en 2018, casi se duplicó. Por el contrario, el gasto en inversión pública bajó 8 por ciento, al pasar de 680 mil 426.5 a 625 mil 393.5 millones de pesos, en el mismo periodo.

En la administración anterior se privilegió la estabilidad económica y el saneamiento de las finanzas públicas a través de una serie de recortes al gasto, en perjuicio de la obra pública.

Así, el mayor gasto corriente generado para el pago de pensiones cada vez fue limitando más la capacidad de la economía de seguir invirtiendo en proyectos que deberían de acelerar el crecimiento a futuro de México, aseguraron especialistas en pensiones.

“La inversión es lo que genera el futuro crecimiento para la economía y entonces se genera un círculo vicioso, en donde ya se está invirtiendo poco en infraestructura y el mayor gasto corriente para las pensiones cada vez va limitando más la capacidad de la economía de seguir invirtiendo en esos proyectos que deberían de acelerar el crecimiento a futuro de México”, dijo Mariano Ugarte, director general de Principal Afore.

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